
Estas manos de pequeña me enseñaron a caminar, comer, atarme las agujetas, vestirme, tender la cama, lavar los trastes, barrer, persignarme, rezar, dar, recibir, ayudar ... ahora todavía me siguen enseñando a amar, respetar, cuidar, vivir con prudencia , humildad, a salir adelante, a disfrutar las pequeñas cosas de la vida , y que estar junto a la persona que amas por más de cincuenta años,no tiene palabras.
GRACIAS!!!!!